Satanás, Príncipe Caído, Rey de las Tinieblas:
"Eras el sello de la perfección, lleno de sabiduría y acabado de belleza.
Habitabas en el Edén, en el Huerto de Dios estuviste.
De toda piedra preciosa era tu vestidura: Rubí, topacio, diamante, crisólito, ónice, berilo, zafiro, carbunclo, esmeralda y oro te cubrían.
Llenaste tus tesoros y tus almacenes.
El día en que fuiste creado te pusieron junto al querube colocado en el Monte de Dios y andabas en medio de los Hijos de Dios.
Fuiste perfecto en tus caminos desde que fuiste creado hasta el día en que fué hallada en tí la maldad.
Por la muchedumbre de tus contrataciones se llenaron tus estancias de violencia; y pecaste y te arrojé del Monte Santo y te eché de entre los Hijos de Dios, el querube protector te hizo perecer.
Se ensoberbeció tu corazón por tu hermosura y se corrompió tu sabiduría."